El hombre llevaba un cartel en el que se podía leer: «La homosexualidad es una abominación para Dios todopoderoso». La respuesta no pudo ser mejor: «Nunca se pierde un evento gay».
El hombre llevaba un cartel en el que se podía leer: «La homosexualidad es una abominación para Dios todopoderoso». La respuesta no pudo ser mejor: «Nunca se pierde un evento gay».