La maestra le pregunta a Jaimito:
-Si yo digo fui rica, es tiempo pasado, pero si digo soy hermosa, ¿qué es?
-Exceso de imaginación.
En el colegio:
– Jaimito, conjuga el verbo andar
– Yo, yo,…., yo, ….. yo ando….Tú, .. esto, tú andas…..
– Más deprisa!
– Él corre, nosotros corremos, ellos corren.
A casa de Jaimito llega una de sus tías de visita. Mientras están merendando, va el niño y le dice a su tía:
– Jo, tía, si es que eres tonta.
Entonces su madre le regaña, claro.
– ¡Niño! ¡Pero cómo le dices eso a tu tía! Dile ahora mismo que lo sientes, venga.
– Está bien… Tía, siento mucho que seas tan tonta.
¡Uf, qué rollo, me apetece ver la tele pero tengo una montaña de deberes pendientes, vaya aburrimiento!
Su madre le responde: -Vamos, Jaimito, que yo sepa, aún no se ha muerto nadie por hacer los deberes.
Y Jaimito le replica: -Sí claro, pero yo no quiero ser el primero.
– Mamá, mamá, en el cole me dicen enchufado.
– ¿Y tú que haces?
– Yo les sigo la corriente
– Mamá, mamá, en el cole me llaman Superman.
– ¡Hijo, otra vez te pusiste los calzoncillos por encima del pantalón!
Jaimito le dice a su padre:
– ¡Papá, papá, tengo una noticia buena y otra mala!
– ¿Cuál es la buena Jaimito?
– ¡Que las he aprobado todas!
– Muy bien, hijo. ¿Y la mala?
– ¡Que es mentira!
– Mamá, mamá, hoy casi saco un 10.
– ¡Muy bien Jaimito! pero… ¿por qué casi?
– Porque se lo pusieron a mi compañero de al lado.
Jaimito en clase:
– A ver Jaimito, qué tiempo es: «esto no debería haber pasado»?
– Preservativo imperfecto.
– ¡Jaimito, en clase no se puede dormir!
– Ya lo sé, hermano Pancracio. ¡No para usted de hablar!
La mamá de Jaimito le dice:
– ¡Jaimito, aléjate de la jaula del león!
– ¡No te preocupes, mamá! ¡No le voy a hacer nada!
Le dice la profesora a Jaimito:
– Dime una palabra que tenga muchas «O».
– ¡Muy fácil seño! ¡GOOOOOOOOOL!
– Jaimito, ¿qué planeta va detrás de Marte?
– Miércoles.
Jaimito le pregunta a su madre:“¿Mamá, qué es lo que tienes en la barriga?”
Y su madre le contesta: “Pues tengo un bebé que me ha regalado tu padre.”
El niño la mira con cara de susto y sale corriendo hasta dónde está su padre y le dice: “¡¡Papá, Papá!! ¡¡No le regales más bebés a mamá porque se los come!!”
Va Jaimito a su madre y le pregunta:
– Mami, mami, ¿los caramelos de chocolate caminan por la pared?
– Pues no, Jaimito. Los caramelos no caminan.
– Ah, vale… pues entonces me he comido una cucaracha.