Los niños de hoy en día no gastan las mismas bromas que antes, son más bromistas los condenados. Se inventan cualquier cosa para engañar a los mayores y reírse de ellos.
Los niños de hoy en día no gastan las mismas bromas que antes, son más bromistas los condenados. Se inventan cualquier cosa para engañar a los mayores y reírse de ellos.