No le intimidan un par de dedos moviéndose a escasos milímetros de su cabeza.
Cuidado con grabar a una mantis religiosa
Al igual que los famosos, odian que les graben.
Gato jugando con una mantis religiosa
Es una cosa rara, rara, rara.
Transporte para los que no tienen prisa
Si no tienes prisa, lo mejor que puede hacer es subirte a un caracol y esperar a que se mueva. Es lo que hicieron la rana y la mantis religiosa que aparecen en las siguientes imágenes.