Pronto no habrá quien los pille.
Descerebrados en un safari
Una familia con niños incluidos se bajó en pleno safari donde había guepardos. Se salvaron de milagro.
¿Permitirías que un guepardo se subiera a tu coche?
En este safari no les preocupó demasiado que un guepardo campara a sus anchas. Igual se acababa de comer una cebra.
Nunca hay que dar la espalda a los grandes felinos
Ahí van algunos ejemplos que prueban la teoría.
¿Te harías amigo de un guepardo?
Son gatitos más grandes de lo habitual.
El mejor ataque es una buena defensa
Nunca había sido tan cierto.
Visita feroz
No es una buena noticia que un guepardo asome por el techo de tu coche en pleno safari.
Perro y guepardo jugando en la nieve
No es lo más normal del mundo, pero a veces puedes ver a un perro y un guepardo jugando en la nieve. Ocurrió en el zoo de Cincinnati.
De paseo por la selva con guepardos
No parece ser muy buena idea. Pasear por la selva acompañada por guepardos es como pasearse por el Santiago Bernabéu con una camiseta del Barça.
Entrenar con los mejores
Para ser el mejor en algo tienes que entrenar con los mejores. Por eso no es mala idea correr al lado de guepardos para convertirte en campeón de los 100 metros lisos.