Si has tirado el ordenador por la ventana tras un ataque de histeria, probablemente no lo puedas reparar de ninguna manera. Si se enciende ya sería un milagro. ¿Lo conseguirá reparar?
Si has tirado el ordenador por la ventana tras un ataque de histeria, probablemente no lo puedas reparar de ninguna manera. Si se enciende ya sería un milagro. ¿Lo conseguirá reparar?