Nos vamos hasta Estados Unidos para ver una broma con cámara oculta que no salió demasiado bien. El protagonista se acercó a unas prostitutas haciendo ver que estaba borracho, y por eso acabaron robándole el móvil. Como en realidad sí que iba sereno, se dio cuenta y pudo recuperarlo, aunque le costó lo suyo. La próxima vez seguro que pensará en otro tipo de bromas.