Estar en el confesionario no tiene que ser nada fácil, escuchar los rollos de la gente no es siempre agradable. Eso sí, algunos cotilleos tienen que ser muy interesantes.
Estar en el confesionario no tiene que ser nada fácil, escuchar los rollos de la gente no es siempre agradable. Eso sí, algunos cotilleos tienen que ser muy interesantes.