Esta mujer lleva tatuada una mantis religiosa en la parte central del pecho. Quien se acueste con ella sabe que correrá el riesgo de pasar por lo mismo que pasan los machos de las mantis religiosas. ¡Qué tía más rara!
Esta mujer lleva tatuada una mantis religiosa en la parte central del pecho. Quien se acueste con ella sabe que correrá el riesgo de pasar por lo mismo que pasan los machos de las mantis religiosas. ¡Qué tía más rara!