Curiosa historia la que nos llega desde Chongqing, China. Resulta que un hombre atropelló a un perro que decidió volver con unos cuantos amigos para destrozar su coche, un Volkswagen Jetta que ahora está lleno de mordiscos en partes como los pasos de rueda delanteros. Un vecino que pasaba por allí hizo las fotos que puedes ver a continuación.