No es fácil saber si le gusta o no, pero yo me decanto porque sí. El gato que aparece en el siguiente vídeo se mueve tímidamente el ritmo de la guitarra que toca su dueño. Lo mejor de todo es la cara que pone al final…
No es fácil saber si le gusta o no, pero yo me decanto porque sí. El gato que aparece en el siguiente vídeo se mueve tímidamente el ritmo de la guitarra que toca su dueño. Lo mejor de todo es la cara que pone al final…