El concepto de amor ha cambiado mucho en los últimos tiempos. Lo de comprar un ramo de rosas y escribir un poema está más desfasado que veranear en Benidorm. Ahora lo que se lleva es oler los pedos de tu pareja bajo la sábana. ¡Eso sí que es amor!
El concepto de amor ha cambiado mucho en los últimos tiempos. Lo de comprar un ramo de rosas y escribir un poema está más desfasado que veranear en Benidorm. Ahora lo que se lleva es oler los pedos de tu pareja bajo la sábana. ¡Eso sí que es amor!