Cuando hay una ‘kiss cam’ siempre pasa lo mismo: la pareja seleccionada por el cámara se da un beso y el público aplaude. Sin embargo, las cosas no siempre salen tan bien como uno espera.
Menos mal que el karma existe para impartir justicia.
Cuando hay una ‘kiss cam’ siempre pasa lo mismo: la pareja seleccionada por el cámara se da un beso y el público aplaude. Sin embargo, las cosas no siempre salen tan bien como uno espera.
Menos mal que el karma existe para impartir justicia.