Ya está aquí el sofá que todos los hombres queremos. Gracias a él no es necesario levantarse para ir a la cocina a por una cerveza, ya que es capaz de servirlas con la ayuda de un sistema que está instalado en uno de sus brazos.
Ya está aquí el sofá que todos los hombres queremos. Gracias a él no es necesario levantarse para ir a la cocina a por una cerveza, ya que es capaz de servirlas con la ayuda de un sistema que está instalado en uno de sus brazos.