Los caballos no han nacido para participar en pruebas deportivas. Por eso algunos se cabrean mucho y se vengan de sus jinetes en cuanto lo ven claro. ¡A continuación podéis ver un ejemplo de lo que os digo!
Los caballos no han nacido para participar en pruebas deportivas. Por eso algunos se cabrean mucho y se vengan de sus jinetes en cuanto lo ven claro. ¡A continuación podéis ver un ejemplo de lo que os digo!