Los parques acuáticos pueden llegar a ser muy peligrosos por la fuerza con la que corre el agua por las atracciones, algunos hasta llegan a perder el equilibrio y se pegan un buen golpe.
Los parques acuáticos pueden llegar a ser muy peligrosos por la fuerza con la que corre el agua por las atracciones, algunos hasta llegan a perder el equilibrio y se pegan un buen golpe.