Para un maquillaje permanente, puedes pintarte los labios con una brocha. El resultado es un rojo más intenso. Lo malo es que luego deberás utilizar disolvente para quitarte la pintura.
Para un maquillaje permanente, puedes pintarte los labios con una brocha. El resultado es un rojo más intenso. Lo malo es que luego deberás utilizar disolvente para quitarte la pintura.